sábado, 23 de mayo de 2020

DIARIO XII

A veces decidimos hablar, o escribir, y lo hacemos. A veces decidimos callar y ese silencio largo y sostenido tiene mucho más sentido que todas las palabras que hubiéramos podido decir. Quizá por eso este silencio que tan alejado me ha tenido de las letras, pero también de todo lo que significa exposición, se ha hecho largo y sostenido. Ni siquiera el tan comentado confinamiento me han hecho volver a decir. Y esta página, como aquellos documentos antiguos, ha quedado almacenada y, quizás, interrumpida. Por eso al asomarme ahora al espacio que tantas veces me ha contenido siento algo de nostalgia y, al menos, dejar constancia de que todo sigue abierto. Que lo que hoy no es, mañana podría ser; que lo que hoy es silencio, mañana puede ser escritura; que lo que hoy está lejos, mañana puede estar cerca. Que lo que no fluye no debe ser obligado para que lo haga.

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